Podemos vivir sin fallar y es nuestra responsabilidad hacerlo. Es posible caminar en una vida mejor y diferente a la que hemos vivido porque estamos en Cristo.
Según 2 Pedro 1: 1-10 ¿Qué es lo primero que tenemos que añadir a nuestra fe? Virtud que es excelencia moral y tiene que ver con mi carácter, mi integridad y mi honestidad.
¿Qué es carácter? Es obediencia, transparencia. Hacer lo correcto y solo podemos hacer lo correcto conociendo la Palabra para caminar en ella y formar nuestro propio carácter.
¿Has hecho lo incorrecto alguna vez por desconocer la Palabra?
Debemos conocer la Palabra de Dios:
- 2 Timoteo 3:16-17 La Palabra es inspirada por Dios, tiene el aliento de Dios y cuando la leemos comemos su aliento que nos ayuda a ser aptos para toda buena obra.
- Salmos 138:2 La Palabra ha sido engrandecida sobre todas las cosas.
- 1 de Pedro 2:2 Tenemos que desear la Palabra como un niño recién nacido (La Palabra nos nutre).
- 2 de Samuel 7:28 La Palabra es verdad, teniéndola dentro nuestro se
forma nuestro carácter y vamos a caminar en una vida diferente.
Nuestra fe tendrá una fuerza diferente a una persona que no tiene
carácter.
Carácter empieza con la sinceridad y honestidad con uno mismo, esto nos permite ser personas íntegras.
Para ser íntegros con otros tenemos que ser íntegros con nosotros mismos primero. Fe con esta calidad de carácter nos lleva a estar siempre arriba y a no caer.
Verdadero carácter nos convierte en productores añadiéndoles a otros. Hacemos lo que tenemos que hacer para que otros prosperen.
Este carácter que tenemos que desarrollar determina lo que otros esperan y aprenden de nosotros (Otros son beneficiados y bendecidos por ese carácter)
Compartir ¿Cómo es una persona íntegra?
Es alguien que no está dividido en sus partes, que no le falta nada. (El ejemplo más grande es Dios, El dijo yo soy uno)
Nuestra fe no tiene que tener división. Tenemos que permitirle a nuestra fe vivir segura porque de ella depende el resultado que nuestra descendencia tendrá.
Un carácter íntegro nos lleva a tomar decisiones firmes que nos llevarán a nuestro destino y a nuestra descendencia a alcanzar la plenitud.
Si nuestra fe tiene carácter podemos decidir bien
¿En qué estado se encuentra tu fe hoy? ¿Has desarrollado un carácter íntegro?
